La democracia es producto de
la cultura de una sociedad, los partidos políticos y sus actores los políticos
también lo son, los hábitos, valores y creencias que los políticos poseen son
en última instancia producto de la educación o de la falta de la misma en una
sociedad dada. ¿Cómo esperar un cambio de actitud de aquellos que nos
gobiernan sin antes replantearnos el valor que nuestra sociedad le asigna a la
educación?.
Si nuestra sociedad siente o
percibe que las conductas de su clase dirigente no son las deseables y por
consiguiente plantean un cambio de actitud, es porque consciente o
inconscientemente, se está cuestionando el modelo de sociedad actual. La
corrupción, la injusticia, la desmedida ambición de poder, la intolerancia, la
indiferencia, la falta de solidaridad, la incapacidad y hasta la ignorancia que
vemos en la mayor parte del stablishment, es el espejo ante el cual se mira
nuestra sociedad. No nos agrada lo que vemos, detestamos el reflejo de
nuestro espejo, pero entonces, porqué no empezamos a tratar de erradicar
aquellos vicios y malos hábitos que tanto nos molesta y desagrada.
Pues bien, la única manera
de hacerlo es promover la “Educación” como el máximo baluarte de
nuestras sociedades, si lo que se pretende es un cambio, una alternativa a la
decadencia social, la única; la más importante y mayor Revolución a la que
debemos adscribirnos es a la “Revolución Educativa”, ni a Revoluciones
de la izquierda ni a Revoluciones de derecha que dividen en forma violenta y
estéril a las sociedades. La aspiración al Bien común solo podrá ser alcanzado
mediante la “Revolución de la Educación”.
La Sociología sostiene que la
vida social se realiza mediante la interacción de los diversos individuos que
componen la sociedad, a lo largo de su vida las personas pertenecen a numerosos
grupos sociales, fuera del grupo no existe vida social, el hombre desarrolla su
actividad a través de los grupos sociales.
Además de considerar a la
sociedad como un conjunto de relaciones sociales que se desarrollan entre
individuos y entre grupos sociales, cabe concebir a la sociedad como un
conjunto de grandes instituciones sociales. Allí, en el seno de las
instituciones desarrollan sus actividades numerosos grupos sociales, a su vez
interrelacionados entre sí, la Universidad, el Parlamento, el Ejército, etc.,
son instituciones de carácter público, a través de las cuales el Estado coordina
y organiza la vida social, política y económica de la sociedad toda. Las
instituciones sociales constituyen una compleja estructura que conforma el
tejido social, a través de las cuales los individuos desarrollan su acción
social, desde la simple relación matrimonial hasta las complejas relaciones
políticas o económicas. En definitiva, el funcionamiento de todo el tejido
social está determinado por las pautas de socialización o la ausencia de ésta
en el proceso formativo del individuo.
Indudablemente la educación juega
un rol fundamental en el desarrollo de cualquier país, la decadencia o el auge
del sistema educativo determina el futuro de los Estados y de las sociedades.
De acuerdo a los últimos estudios
realizados por diversos organismos internacionales como la OCDE (organización
para la Cooperación y Desarrollo Económico) y el Foro Económico Mundial, se
pudo conocer la lista de los países con mejor educación en el mundo. Países asiáticos
como Singapur, Corea del Sur, China, Japón figuran entre los primeros puestos
seguidos por Finlandia, Estonia, Canadá, Suiza y Dinamarca entre otros. En los
estudios también puede observarse la lenta pero constante decadencia de los
sistemas educativos de Latinoamérica.
Las naciones de América
Latina no sólo deben redefinir que rol desean jugar en los próximos 100 años
sino que, al mismo tiempo, dependiendo de la decisión, deben comenzar a
reestructurar y reorientar sus respectivos sistemas educativos en función de
sus objetivos.
A continuación se expondrán
brevemente algunos aspectos de los sistemas educativos de Singapur y Finlandia para
ejemplificar y quizás tomar los aspectos más positivos y trasladarlos a la
realidad Latinoamericana.
El caso de Singapur es
realmente sorprendente ya que comenzó en 1990 a analizar las causas de su
desastroso sistema de educación y tras el análisis llegaron a las siguientes
conclusiones; un docente con bajo nivel, poco motivado, con escaso
reconocimiento social y con sueldos bajo. Por esta razón, en 1991, el Gobierno
dio un salto sin precedentes: igualó el sueldo de los profesores con el de
ingenieros y abogados, claro está con una selección muy meticulosa del
personal. Además, se comenzaron a realizar importantes inversiones en cuanto a
la infraestructura educativa y a la permanente capacitación de los docentes. En
el siglo XXI, donde la sociedad del conocimiento es el gran paradigma, Singapur
ha convertido a la educación en el factor esencial para el desarrollo del
país. Su sistema educativo es extremadamente efectivo, lo cual es reconocido en
todo el mundo. El país ha logrado crear excelentes escuelas, preparar maestros
capaces y formar estudiantes con alto rendimiento. La tarea de la escuela es
dar a los estudiantes la oportunidad de desarrollar las aptitudes, el carácter
y los valores. La estrategia que lleva a tal fin es ayudar a cada niño y joven
a descubrir su propio talento.
En este contexto, los
estudiantes adquieren la capacidad de investigar, desarrollar nuevas formas de
pensamiento para resolver distintos problemas, y hacer proyectos que crearán a
futuro sus propias oportunidades de vida.
En 2008, el Gobierno
introdujo dos nuevas medidas para mejorar la calidad de la educación
preescolar: 1) Un aumento de mínimos en la cualificación académica para los
maestros de ese segmento. 2) Una evaluación rigurosa para asegurar la calidad y
la acreditación marco en los centros.
Los centros preescolares tienen el deber de fomentar un fuerte sentido de pertenencia y orgullo nacional entre los pequeños.
Entre otros factores para
lograr un sistema educativo de alta calidad el Ministerio de Educación creó un
sistema estándar de evaluación de la calidad que se aplica en instituciones
públicas y privadas.
Los resultados de este
sistema quedan reflejados año tras años en las diversas competiciones en las
que los estudiantes de Singapur ocupan una y otra vez las primeras
posiciones, También se refleja en el alto número de ciudadanos extranjeros que
eligen las escuelas singapurenses para educar a sus hijos mientras ellos siguen
viviendo en sus países de origen.
Como lo dijo el Director de
la Universidad Nacional de Singapur, Tan Chorh Chuan: "…Para nosotros, la
educación es una cuestión de supervivencia. Singapur no tiene recursos
naturales, de manera que no podemos sobrevivir si no nos concentramos en formar
gente…"
El caso de Finlandia también
es sorprendente, con un sistema educativo bastante diferente al de muchos países
del mundo. En el mismo se hace mucho hincapié en la igualdad de la educación, uno
de los objetivos centrales de la política de educación finlandesa es darles a
todos los ciudadanos las mismas oportunidades de acceso a la educación. Soporte
educativo para orientar a los alumnos, es esencial para alcanzar la igualdad en
la educación. El propósito es apoyar, ayudar y orientar a los alumnos para que
alcancen el mejor resultado posible en sus estudios y, además, para que estén
capacitados para tomar las decisiones correctas y apropiadas referentes a las
opciones alternativas de su educación y carrera futura.
La enseñanza obligatoria
empieza a los siete años, después es posible elegir dentro de la educación
secundaria superior entre los estudios generales o los de formación profesional
y, posteriormente, pasar a una escuela superior profesional o a una
universidad.
La política educativa es
responsabilidad del Ministerio de Educación. Además cada provincia finlandesa
tiene su propio Departamento de Educación y Cultura que poseen lineamientos
generales y controlan el cumplimiento de las metas y objetivos. La administración
de la educación a nivel local es responsabilidad de las autoridades locales, o
sea, las autoridades locales fungen como entidades proveedoras de servicios
educativos. Las entidades proveedoras de servicios educativos determinan el
grado de autonomía que se concede a las escuelas. Las escuelas están
autorizadas para impartir servicios educativos de acuerdo con sus propios
arreglos administrativos, con tal de que las funciones básicas determinadas por
las leyes sean respetadas.
En líneas generales, vimos
algunos aspectos de dos de los mejores sistemas educativos del mundo y que continúan
mejorando y perfeccionándose año tras año. Evidentemente los países Latinoamericanos,
deben comenzar a cuestionarse de manera muy seria que valor le asignaran a la
educación de cara al futuro, tengamos siempre presente que “una sociedad es
lo que es su educación”.
Ha llegado la hora, bastante
tarde por cierto, de planificar hacia el futuro, hoy en los inicios del Siglo
XXI, no puede haber dudas de que lo único capaz de moldear una sociedad más
Justa, más Solidaria, más Democrática, solo puede ser alcanzada mediante una
verdadera “Revolución Educativa”, aquellos pueblos que no lo entiendan
así, estarán condenados al fracaso; al más rotundo y contundente de los
fracasos.
“…La educación es el
pasaporte hacia el futuro, el mañana pertenece a aquellos que se preparan para
él en el día de hoy…” Malcolm X.
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